Una situación compleja derivada de tres años de profunda sequía y la bajante del Río Paraná que sigue afectando a la zona. La opinión de los productores ganaderos y el reclamo de un Senador nacional de Juntos por el Cambio
Más de diez mil hectáreas de pastizales naturales en las islas del delta del Río Paraná se están quemando desde hace casi una semana. Una situación compleja, derivada de tres años de profunda sequía y una bajante del Río Paraná que sigue afectando a la zona, que comprende las costas de Rosario y en las cercanías de Alvear y la ciudad bonaerense de San Pedro.
Matías de Bueno, Responsable del Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario, aseguró a Infobae que el humo es provocado “hoy en los alrededores de la ciudad por los incendios en unas diez mil hectáreas que aún están encendidas. Estos fuegos se dividen, según lo muestran las fotos satelitales evaluadas, por unas 2.500 hectáreas ubicadas en las islas frente a Rosario, a una distancia de diez kilómetros hacia el lado de la ciudad de Victoria, en Entre Ríos. También tenemos otras 2.500 hectáreas que se queman frente a San Nicolás de los Arroyos, en Buenos Aires, y se suman a otras 5.000 hectáreas, frente a la localidad de San Pedro”, comentó.
El especialista explicó que para la situación de ahogo por el humo que provocan los fuegos “hay un agravante, y es que estamos con viento proveniente del este, y también del sudeste, lo que provoca el ingreso constante de humo a Rosario, hecho que hace que la ciudad se viva un clima irrespirable”. Desde el Observatorio Ambiental se indicó también que “es factible que se produzcan incendios en las islas por la gran cantidad de material vegetal seco que hay allí por efecto de la última sequía, registrada desde el último verano, y también por la bajante del Río Paraná”.
Según De Bueno, “hay una enorme responsabilidad del Estado Nacional y Provincial, y esto por los tres gobiernos (de Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos) que integran el acuerdo interjurisdiccional PIECAS (Plan Integral Estratégico para la Conservación y Aprovechamiento Sostenible en el Delta del Paraná), y también por el Ministerio de Ambiente de la Nación, como autoridad de aplicación, porque deberían estar conformados en un Consejo de Emergencia Interjurisdiccional, como lo determinó la Justicia, y deberíamos tener una acción preventiva y no como se genera en este momento en el que a todos le afecta de manera negativa, cuando solo lo que se hace es ir corriendo detrás del fuego”.
El especialista señaló que la instalación de los faros de conservación para prevenir incendios, “hoy solo son cámaras que detecta el fuego en momentos en el que ya está encendida la zona. Falta prevención y la instalación de los destacamentos. Por ello desde la Universidad de Rosario, que mide y controla la zona, hay propuestas muy claras: hay que conformar una policía interjurisdiccional para controlar en el terreno, la cual debe actuar como prevención y seguridad en el territorio”.
La opinión de los productores
En momentos como los actuales con los incendios en las Islas del Paraná, siempre aparece en el debate el rol de la ganadería y su impacto en la biodiversidad. Al respecto, Analía Esperon, productora del Delta Medio, en diálogo con el portal Bichos de Campo sostuvo que “ahora en esta zona no tenés suficiente carga de herbívoros que consuman el pasto. Se perdieron un montón de cabezas de ganado y no hay roedores como los carpinchos o las nutrias. Un montón de productores ganaderos se han ido de la zona del Delta por los costos de la hacienda en pie”.
A todo esto, el presidente de la Sociedad Rural de Victoria, Eduardo Grimaux, advirtió que en marzo pasado “previmos que esto iba a pasar. Antes con las bajantes que hubo, las lagunas estaban secas y con arena. Ahora tienen pajonales de tres metros de altura, que encima se secaron por la ola de frío. Eso es combustible puro”, agregó.
Y otro debate que se genera en este tipo de situaciones, está relacionado a la falta de controles y medidas de seguridad en las Islas, por el desarrollo de las actividades turísticas, la caza ilegal de animales y las economías de subsistencia. “Para que no se incendie esto habría que prohibir el acceso humano prácticamente. La población más importante de las islas son pescadores. Después de ellos viene la población temporaria del turista de fin de semana. En tercer lugar yo pondría a la actividad ganadera. Además de la pesca, quienes viven allí prenden fuego para acceder a alguna laguna, para cazar algún animal e incluso para limpiar. Nadie se quiere meter con eso porque es la población más grande, que no tiene recursos y cuya actividad es la subsistencia”, dijo Gonzalo Dumont, Vicepresidente de la Sociedad Rural de Victoria.
Pedido de informes
El senador nacional de Juntos por el Cambio por la provincia de Santa Fe, Dionisio Scarpin, presentó un proyecto de información en la Cámara Alta para conocer el detalle de las acciones que lleva adelante el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, ante los constantes focos de incendio que se registran en Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires.
Por los incendios registrados en las islas del delta del Río Paraná, el legislador expresó que “a inicios del año, el ministro de Ambiente, Juan Cabandié estuvo en el Senado, donde le dijimos que su obligación ante lo sucedido en 2021 era planificar, organizar y prevenir. Y allí le solicitamos actuar de forma rápida ante estos episodios: hoy se está viendo inconvenientes y falta de respuesta con las quemas que se están dando en Santa Fe. El riesgo para la población y el ambiente que representan estos siniestros, nos llevan a volver a insistir y a pedir información acerca de la existencia y eficacia de las acciones de prevención, la disponibilidad de recursos para atender el manejo del fuego y la capacitación de brigadistas”.